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Online o en CD, legal o ilegal, lo que vale es la música


En medio de todo el remolino de información que hubo durante esta semana, uno de los tópicos más que interesantes en el que tiene que ver con la música digital y los derechos de autor.

¿Por qué este tema puntual? Por cuestiones muy simples. Antes que nada, porque en algún momento todos fuimos, somos o seremos consumidores de música digital (como unos años atrás lo fuimos de los CDs). Esta es una tendencia masiva que cada vez está más internalizada en nosotros.

Y otra cuestión tiene que ver con la masificación que también hay con respecto al consumo de música online de procedencia ilegal, aunque en este sentido también se está aumentando el consumo de música legal.

En este negocio de la legalidad están implicadas las grandes compañías, no sólo las discográficas que pelean por no perder un peso por más que sus ingresos sean o hayan sido más que altos en algún momento (¿o acaso cuando no había música online y todo se vendía por CDs o cassettes -si vamos un poco más lejos-, nosotros consumidores, nos veíamos beneficiados con algo?) sino también aquellas que nunca quedan fuera de nada.

Una de las que está en este último grupo es Google, justamente una de las grandes corporaciones que sufrió terribles dolores de cabeza con su hija adoptiva YouTube. Los miles de millones de dólares que hay en juego hicieron que finalmente decidiera establecer un método seguro para respetar el derecho de autor de todo el material que se suba a la página. O por lo menos es lo que intenta hacer.

Pero también es real que la adquisición de música por vías legales está cobrando más fuerza. Recordemos que Apple festejo sus 3 mil millones de canciones vendidas a través de iTunes en sólo cuatro años, de los que mil millones pertenecen a estos primeros seis meses del año. Y en Argentina, por ejemplo, el incremento de la música online fue de más del 270% en los últimos seis meses (con respecto a los seis primeros meses de 2006) frente a un incremento del 2,7% del consumo de CDs.

Simple y llanamente lo que importa es la tendencia de la música online. Por diversos factores: es más cómodo buscar algún tema puntual de una banda que tener el CD completo con canciones que ni nos interesan y que ni vamos a escuchar. Porque si queremos un tema en este momento lo podemos adquirir ya, y así se pueden plantear muchas otras razones que incentivan el consumo de la música digital. Y porque sencillamente, todo tiende a digitalizarse. O quién puede dudar de esta verdad que se viene afianzando desde hace unos años.

Bueno, sí, hay algunos que lo dudan porque no todos ven la cuestión de la música digital color de rosas. Y sino, preguntémosle a Elton Jhon, quien aseguró que la solución para la caída de la ventas de discos frente a la música digital está en que se cierre Internet por cinco años.

Dejando este punto de vista de lado obviamente, la música es lo que vale como también las tendencias que marca el usuario. Cada vez están quedando más de lado los CDs (y sus altos precios también son un motivo que llevan a esto) y la venta de música digital cada vez tiene más ímpetu pero no es lo mismo que el consumo de la música ilegal. Y bueno, cada uno defiende su quintita y va a hacer más fuerza por lo que le conviene. Es el usuario el que tiene la última palabra.

Más información:

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Por Analía Lanzillotta, el 05/08/2007.

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